Hitler en el cine

 
Antes de comenzar dejemos claros unos puntos, debido a la temática siempre polémica que voy a citar, dejémoslo claro ahora para disipar toda duda:
 1-      Este blog no es de política.
 2-      La política nazi y sus derivados no son de nuestro agrado. Los rechazamos rotundamente.
 3-      Sólo nos interesa el componente histórico y cultural de las películas citadas.
 4-      Cualquier comentario que haga apología del nazismo quedará borrado y su autor bloqueado.


El Adolf Hitler como personaje histórico, sólo nos interesa como eso, como personaje histórico y como ejemplo a tomar en consideración para que aquello que hizo no se vuelva a repetir nunca más de los jamases. (Algunos políticos han tomado buena nota histórica pero para reproducirla otra vez, desafortunadamente) Pero el personaje cinematográfico de Hitler, sí nos llama más atención verlo en pantalla, si bien en muchas cintas es nombrado, debido a la ambientación de innumerables películas de género bélico, donde naturalmente se nota su presencia sin que aparezca ni un segundo en pantalla, en otras pocas es personaje participe de la trama. Menos películas, pero “haberlas haylas”. Esta entrada pretende ser un recopilatorio de aquellos actores que tuvieron la valentía de encarnar a este ser y numerar aquellas películas donde aparece como personaje, hoy voy a proponeros cinco películas de las que he podido recopilar, a medida que vaya descubriendo más las iré añadiendo, actualizando la entrada. Naturalmente no podía empezar esta enumeración sin nombrar a uno de nuestros actores favoritos y uno de los artistas de cine más grande de todos los tiempos, el señor Charles Chaplin:

"Chaplin"

El Gran Dictador: En esta obra maestra del cine de 1940, Charles Chaplin hace doblete interpretando a su personaje de costumbre Charlot como el barbero judío, (última película de su personaje de Charlot. El mismo Chaplin anticipo su despedida en el momento que el cine pasara a ser sonoro, se despediría de su personaje cuando Charlot tuviera algo importante que decir…y de que manera!) que padece amnesia debido a un accidente de avión durante la primera guerra mundial, y a “Adenoid Hynkel”, dictador de Tomaína. Es curioso, sin entrar en harina ya que tendremos tiempo de desmigar esta película con su debido tiempo, la capacidad visionaria de Chaplin en esta película, concebida y escrita en pleno apogeo del Nacional Socialismo, momentos antes de iniciarse el conflicto.

"Hinkel"

Con Hitler dijo que sólo compartían el bigote, y que era curioso como el mundo a él le consideraba una buena persona, que era uno de los más queridos, y por contra Adolfo uno de los más odiados. Chaplin, sin ánimo de quitar hierro a lo que acontecía en el mundo en los años 40, argumentaba con parte de razón, que para perder el miedo a una persona, para humanizarla, en el sentido que nos ocupa, en la cual Hitler era una especie de Dios para sus seguidores fanáticos, para perderle el respeto, una de las mejores cosas que se podían hacer era reírse de ella mediante la parodia. Hynkel es una parodia de su homónimo, una caricatura que nos hace reír por patético, ridiculizando al dictador y haciéndole vulnerable. Cada uno aporta lo que puede, los soldados en el frente con su vida, los actores cómicos con su sátira y crítica.
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Michael Sheard

¿Y quien es este buen hombre?. Lo poco que se de este actor, es debido a la recopilación de información para esta entrada y me he llevado una sorpresa. De él sé que fue un actor de reparto Escoces nacido el 18 de Junio 1938, y fallecido el 31 Agosto de 2005. Su interpretación de Hitler fue una aparición muy corta en Indiana Jones y la última cruzada, pero que de seguro todos la recordarán de por vida. El mismísimo Fuhrer firma un autógrafo a nuestro héroe. Montaje breve y con mucha fuerza de la cual nos dice mucho en el poco tiempo que dura la escena.



No fue su única colaboración con el Tándem “Lucas-Spielberg”, puesto que el bueno de Sheard también participo en la segunda entrega de la saga de Star Wars, bueno a decir verdad en la V entrega numerada ahora, pero para los de mi quinta es la segunda y no hay más que hablar: El Imperio Contraataca
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Martin Wuttke



Y volvemos a la caricatura, o la pseudocaricatura que el siempre sorprendente Quentin Tarantino nos recrea para la ocasión. A éste Hitler le ha salido un grano en el culo en forma de batallón judío que está diezmando a sus soldados empleando con ellos las mismas tácticas que su régimen: el terror. Descabellados y marcados, los Bastardos devuelven a un soldado de cada batallón ejecutado, como muestra de sus artes, para que pueda no sólo contar lo que les ha ocurrido a sus compañeros si no para advertirlos de que los demás correrán la misma suerte, no sin antes marcarlos como a cerdos, con la Esvástica “tatuada” a golpe de cuchillo en su teutona frente. Marca que esconden tras sus gorras de soldados preguntándonos ¿no estáis tan orgullosos de vuestros ideales y símbolos? ¿Pues a que viene ocultarla? Lo mejor de la peli, la catarsis histórica (para no spoilear), será licencia histórica, pero que placer supone.

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Melvin Kaminsky

Más conocido por estos entornos como Mel Brooks, no necesita presentación y siguiendo con las parodias, en su “Soy o no soy” interpretaba, aparte de unos cuantos papeles más, al Dictador:
 
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Bruno Ganz
Nos despedimos hasta nueva actualización con el que es, a nuestro juicio y hasta que otro tome el relevo, la interpretación más fiel aunque arriesgada del personaje histórico, nos referimos como habrán podido deducir a su actuación en El hundimiento. Película que nos narraba los últimos días del Dictador hacinado en su bunker de seguridad. El cómo la locura que todos daban como revelaciones divinas al principio, cuando las cosas iban bien, se tornan en percepciones reales, ahora que la mierda los llega al cuello.

 

A su director Olivier Hirschbiegel, se le etiquetó de Nazi, por tratar el lado “humano” del personaje. Nos remitimos un poco más arriba en cuanto al concepto “Humanizar” con Chaplin. Una cosa son los actos de Adolf Hitler en cuanto a sus crímenes, en la que toda persona racional estará de acuerdo en condenarlos, pero de igual modo pensaremos que hasta el diablo tiene sus momentos de calma, cosa que tratándose de una película íntegramente de Hitler, el director deba de considerar a filmar. Defiendo la obra del director, no la personalidad de este asesino, vuelvo a dejarlo claro. De momento y para no alargar la entrada demasiado, concluyo reservándome alguna que otra interpretación más.

 Hasta entonces un saludo. Mr Hyde.

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